Ya queda muy poco. La veda de salmónidos en el sur de Castilla y León -Ávila, Salamanca, Segovia y Valladolid- se abre el tercer domingo de este mes de marzo. Los apasionados por salir al río con cañas, y la tortilla de patata para el almuerzo, deberán esperar hasta el primer día de abril. Pero eso no significa que, al margen de en los cursos de agua de gestión pública y con especies salvajes, sea imposible disfrutar todo el año de la pesca y el hermoso entorno que siempre componen las aguas continentales de la Comunidad.
Hay lagos privados en los que deportistas, familias y grupos de amigos pueden pasar un día inolvidable. Son masas de aguas muy cuidadas, en las que la densidad de peces es abundante y donde el pescador y sus acompañantes disponen de todo lo que necesitan.
El leonés lago de Jabares, Complejo Recrea en Renedo de la Vega, Pisórica (Melgar de Fernamental, en Burgos), Llanillo (Burgos) y Palenzuela (Palencia) son la alternativa. Muy buenas opciones para acudir cuando son los únicos escenarios en los que es posible echar el señuelo al agua. El lugar perfecto para iniciar a los niños en los secretos de la pesca, la vida de los peces y en cómo funciona el ecosistema de agua dulce. Incluso con la veda abierta en otros ríos y en los muchos embalses, sobre todo para el riego de los cultivos, que se distribuyen por la diversa geografía castellanoleonesa.
Son escenarios que cada vez tienen más protagonismo en la agenda del aficionado español. En competición, la pesca en lago siempre ha lastrado los excelentes resultados que el equipo ha logrado en los campeonatos mundiales y europeos. Ya ha empezado a cambiar la dinámica, tanto en la élite que aspira a títulos como en el conjunto de la afición. Estos lagos son donde entrenan las técnicas y estrategias de pesca que los centroeuropeos han desarrollado y en las que siempre han sido especialistas.
Castilla y León cuenta con cerca de media docena de lagos de gestión privada para la pesca, capaces de satisfacer las aspiraciones del amante de la naturaleza. Ahí hay cabida para todos. Desde el niño que por primera vez y repleto de emoción lanza la cucharilla al agua mientras contiene la respiración hasta el veterano que solo busca sentir por enésima vez cómo una trucha captura, pletórica de energía, la presa que identifica como alimento para después intentar zafarse del sedal invisible. Los competidores ocupan muchas horas en estos espacios.
La imagen del pescador sentado y leyendo un libro mientras espera a que el pez pique en la lombriz que ha ensartado en el anzuelo no va con ellos. Incluso ninfas y ‘streamers’ dejan paso a otros cebos. Las ‘ovejitas’ -imitaciones de huevas confeccionadas con materiales sintéticos de diferentes colores- son lo último de lo último para la trucha arco iris.
Cualquiera pude acudir como espectador a los importantes campeonatos que se celebran. Un día normal incluso puede compartir jornada e intercambiar experiencias en estos lagos con pescadores como el campeón del mundo 2012 en Eslovenia, David Arcay, el campeón de Europa de 2013 o el leonés Pablo Castro ‘el Bombero’. Como casi todo, la pesca avanza. Fundamentalmente en técnicas que son más deportivas y que ya no le ocasionan ningún daño a la captura, excepto el estrés que le produce que la saquen durante unos pocos segundos de su medio natural. Ya casi nadie ve en la actividad una despensa en la que obtener alimento, sino la fórmula para integrarse al cien por cien en el medio natural.
A quince minutos de León
El lago de pesca Jabares, está situado a solo quince minutos en coche al sur de León capital, cerca de Palanquinos , en el termino municipal leonés de Campo de Villavidel.
Este recinto privado está gestionado por Deportes Marso. La superficie de agua son 20.000 metros cuadrados, en el hay truchas arco iris, para practicar la pesca deportiva tanto en la modalidad de captura y suelta -con señuelos que no dañan y devolviendo el pez al agua en perfectas condiciones- como con muerte.
Jabares tiene una gran reserva de truchas de todos los tamaños. Destacan algunos ejemplares que superan incluso los tres kilos. Viven en unas aguas limpias y en constante renovación natural. El lago está rodeado de abundante vegetación, pradera con árboles, zona para descansar y reponer fuerzas con una comida campestre, mesas y un refugio de pescadores con chimenea. Es para pasar agradables y divertidas jornadas de pesca. Personas con movilidad reducida, clubes y asociaciones de pesca disponen cerca de la ciudad de León de un lugar permanente.
En Complejo Recrea abren de martes a domingo; los lunes solo si son festivos. La actividad comenzó el 7 de octubre de 2014 en estas lagunas cercanas a la localidad palentina de Saldaña. Organizan campeonatos, además de celebrar algunos que corren a cargo de otros. Son campeonatos que ya están instaurados. La única especie cuya repoblación está permitida es la trucha arco iris. Ni tan siquiera es necesaria la licencia de pesca. Tampoco es imprescindible reservar antes para ir a pescar, pero siempre es conveniente.
En las lagunas, al lado del río Carrión, Complejo Recrea dispone de bar y restaurante. Son lagos artificiales, pero de agua natural y no estancada. Han sido creados por la extracción de áridos y el agua proviene del río por alcanzar el nivel freático. Así, en el fondo de las aguas hay corriente de continuo además de contar con una toma constante desde el Carrión para oxigenar y clarear más. La flora es muy abundante. Mucha de ella es nacida del propio terreno, mientras que otra ha sido plantada como, por ejemplo, muchos árboles frutales. Se decidieron a abrir los lagos para la pesca de trucha “para conseguir que las personas tengan un lugar para divertirse y en el que emplear su tiempo libre de una forma amena, ofreciéndoles todos nuestro servicios con este fin”, señalan.
En Burgos y Palencia
Miguel Basconcillos es quien gestiona los lagos burgaleses de Pisórica (Melgar de Fernamental) y Llanillo (Valle de Valdelucio). También Palenzuela (Palencia). En el centro de Melgar organiza cursos de pesca, lanzado y visitas de colegios y de colectivos relacionados con la pesca. Además, alquilan bicis de montaña y tienen acuario gigante y otro interactivo en el que se pueden tocar los peces y cangrejos. Han creado un club deportivo llamado Pisórica. Organizan la primera feria de pesca de Melgar, que se celebrará los días 17 y 18 de marzo. Junto al lago Pisórica disponen de un tramo libre del río Pisuerga, de manera que los cursos en temporada pueden ser tanto de lago como de río.
El centro de interpretación Pisórica forma parte del proyecto Cuatro Villas en el que participan Melgar de Fernamental, Castrojeriz, Sasamón y Villadiego. En un primer edificio, además de ver una especial pieza audiovisual de animación sobre la relación del ser humano con el río, podremos contemplar una serie de réplicas de herramientas históricas que los hombres han utilizado en los ríos. En una gran pantalla panorámica, Fer y Pisórica, la ninfa del río, explicarán, planteando también preguntas al visitante cómo la especie humana ha convivido con los ríos. Desvelan cómo se inventó la pesca, qué herramientas se han utilizado, qué ofrecen los ríos a los seres humanos y cómo los humanos estamos acabando poco a poco con ellos.
Una singular escenografía muestra diversas replicas de herramientas históricas y en la que se representan diferentes momentos históricos de la vida del río. Viaja a la Prehistoria para conocer los primeros anzuelos y arpones de hueso y a la Edad Clásica para saber de los avances aportados por el imperio romano (como el esparavel) y también de sus técnicas de salazón para conservar las capturas. En la Edad Media veremos cómo el río deja de ser exclusivamente fuente de alimentos y agua, y se convierte en aliado del hombre a la hora de moler cereal. El río sirvió en estas tierras de la Cuatro Villas como motor de su despertar industrial, con el Canal de Castilla como su máximo exponentes. Aquí, además, es posible navegar en un barco por el impresionante acueducto de Abánades.
Anterior a este novedoso proyecto, en el que la pesca es un argumento transversal para el desarrollo de la comarca de Amaya, es el lago de Llanillo, que ahora está cerrado por la sequía. “Apenas ha cogido agua este invierno, lo que me ha obligado a suspender todos los campeonatos más importantes de lago que se celebran en España”, lamenta Basconcillos.
Por lo general, abren al público los fines de semana y festivos. Los días laborables es posible si hay previa reserva con un grupo de pescadores.
“Nuestra filosofía es de lagos de pesca trucha arco iris, en los que los aficionados a la pesca practican durante todo el año, a la vez que organizamos o los alquilamos para cualquier tipo de competición, ya sea oficial o de asociaciones. En nuestros lagos se han organizado competiciones oficiales provinciales y autonómicas de varias comunidades. En Llanillo hemos organizado los dos primeros campeonatos nacionales de salmónidos en lago”, señala el gestor de estos espacios.
La zona privada de pesca en Palenzuela está configurado por dos balsas separadas con un gran espigón. desde donde resulta muy cómodo lanzar utilizando cualquier técnica. Lo habitual es que solo repueblen una de las dos balsas, para concentrar de esta manera mayor número de peces.
No hay disculpa para disfrutar del río y la pesca solo durante la temporada oficial de apertura de vedas. Estos espacios, perfectamente acondicionados y con buena densidad de peces, son la propuesta ideal para organizar una buena jornada entre amigos y ampliar conocimientos sobre un apasionante mundo vinculado a la vida en agua.
