La banda barcelonesa colmó anoche las expectativas de un público entregado que llenó el teatro Carrión durante el espectáculo ‘Espejos y espejismos’
Poco antes de que Lofe of Lesbian saliera al escenario del Carrión, a la 8:45 horas, comenzó a llover en Valladolid después de un magnífico día soleado. En el interior del teatro, por el contrario, el ambiente seguía siendo cálido y repleto de buen ambiente.
Todas las butacas estaban ocupadas por una audiencia que acudió ya entregada; dispuesta a disfrutar de la noche del domingo, con ganas de acompañar al grupo en sus canciones y con palmas y comentarios a voz en grito. Y nada falló.
Las dos horas y cuarto que duró ‘Espejos y espejismos’ -un concierto más intimista de lo habitual en festivales, teatralizado en parte y siempre buscando la complicidad y el diálogo con el público- se hizo corto a la mayoría de los asistentes. No había prisa por terminar.
Y es que hubo casi de todo. Desde la celebración del cumpleaños del solista de la banda de indie rock, Santi Balmes, hasta bien humoradas alusiones constantes a todo tipo de asuntos. El cantante y el guitarrista Julián Saldarriaga protagonizaron algunos de los diálogos más celebrados por el público. Y, por supuesto, hubo buena música. «Es una manera de oxigenarnos todos», comentó a la concurrencia el líder del grupo.
La selección de temas para el espectáculo repasó composiciones de la ya larga carrera del grupo que apenas interpretan en directo. «Son canciones de las que nos orgullecemos, pero no tienen cabida en un festival», se justificó Balmes ante una audiencia que le rindió devoción todo el tiempo.
A pesar de todo, para la traca final de un concierto que fue de menos a más se reservaron temas de sobra conocidos por sus admiradores como ‘El poeta Halley’ como penultima bala. Acabaron con un apoteósico ‘Oniria e Insomnia’, justo cuando algunos fanáticos del grupo ya lo daban por perdido.
‘Nada’, ‘Contraespionaje’ y ‘Cuestiones de familia’ abrieron el recital y también se podieron escuchar algunas más reconocibles para los menos expertos como ‘Los días no vividos’, ‘La noche eterna’ y ‘Planeador’.
En muchas de ellas la escenografía incluyó perfomances con marionetas, sombras, muñecos… Incluso un zepelín recorrió la sala del teatro Carrión.
Veinte años de brillante carrera musical que Love of Lesbian acreditó con nota alta ayer en Valladolid.
