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En el camino… Carcedo de Burgos

Chelo Miñana. Experta en Turismo

¿Cómo y cuándo? ¿Cuándo tenemos el tiempo y cómo lo vamos a aprovechar? Para muchos y casi todos, es el fin de semana el momento en el que hay que decidir si vamos a descansar o reactivamos cuerpo y mente latiendo a diferente ritmo del diario. Mar o montaña, pueblo o ciudad. La decisión casi siempre viene marcada por una mezcla de lo que quieren ver nuestros ojos, lo que han visto y disfrutado nuestros amigos. Y en la mayor parte de las conversaciones, la gastronomía nos hace estar más seguros de la decisión a la hora de señalar un punto y poner rumbo a él.

Chelo Miñana
Chelo Miñana

Nos quedamos en Castilla y León seguro. Punto uno solucionado. Innegable que el entorno rural es uno de los grandes atractivos de esta comunidad y que cobra personalidad propia en cada una de sus nueve provincias. En esta ocasión hemos decidido disfrutar del patrimonio de la provincia de Burgos sin dejar de alzar la vista para admirar su imponente catedral; esta vez nos alojamos a pocos kilómetros de una capital porque no queremos renunciar a nada y buscamos un bullicio controlado e intermitente.

Menos de 300 habitantes están censados en Carcedo de Burgos. Tan solo ocho kilómetros separan al Hotel Rural La Tenada del centro de la ciudad. Mirar su web provoca una sonrisa cuando buscas más habitaciones de las que vas a encontrar, porque la palabra hotel cobra una nueva dimensión. Esa es la magia del entorno rural: su capacidad de reinventar conceptos y romper con lo establecido.

Se cumple el dicho ‘los buenos perfumes vienen en frasco pequeño’, y simplemente con acceder al edificio nos damos cuenta de que el nivel de detalle va a ser protagonista para convertir nuestra estancia en un lujo.
Un antiguo refugio de ovejas, que ha conservado su estructura original. Madera y forja se suman a ella para obtener una decoración cálida, que arropa al huésped y le hace sentir parte de la historia de La Tenada.

Un entorno lleno de historia nos hace trasladarnos a tiempos del Cid visitando el monasterio de San Pedro de Cardeña. Este conjunto monástico es célebre por haber sido lugar de cobijo y residencia para la familia de Rodrigo Díaz durante su segundo destierro, y haber sido el segundo lugar de enterramiento del caballero. Siguiendo la historia terminaremos en un crucero de la catedral de Burgos, donde se encuentra enterrado junto a Jimena, su mujer.LATENADA_ARGI

Como complemento a nuestras incursiones en la historia es inevitable aprovechar que Carcedo es parte del Camino de Santiago y también del Camino del Destierro. Encontramos a pocos kilómetros las múltiples posibilidades de las Vías Verdes de la Sierra de la Demanda, donde podemos seguir la senda de un tren imposible que pretendió unir las minas con Burgos, y que acabó abandonándose por falta de rentabilidad.

Volver al hotel tras una intensa jornada de descubrimientos es un premio. Elegir el momento ‘piano’ o quedarte hipnotizado con la luz crepitante de la chimenea, conectarte de nuevo al mundo digital o pasar las páginas y sentir el papel, rodeado de armonía y de esa elegancia que solo pueden dar los detalles y el cuidado de quien se sabe anfitrión y ejerce como tal. Descubrir el destino, descubrir el hotel… Descubrir un hotel, descubrir un destino.

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