La próxima edición de la muestra de arte sacro ya tiene nombre, Aqua, y sede: la Colegiata de Santa María la Mayor, en Toro
La localidad es uno de los destinos predilectos del turismo cultural en la provincia de Zamora y hace inevitable que la próxima edición de Las Edades se vincule al románico; una muestra con sabor a historia y a vino
Ricardo Ortega
Quince años después de que la ciudad de Zamora acogiera la muestra Remembranza de Las Edades del Hombre, la exposición de arte sacro regresa a la provincia. Otra vez a orillas del río Duero y otra vez de la mano de una joya románica (aunque a caballo con el gótico) como es la Colegiata de Santa María la Mayor, en Toro.
La cita anual con Las Edades del Hombre pone el foco sobre una localidad rica en patrimonio, tan vinculada al medio rural que da su nombre a una de las comarcas vitivinícolas más singulares de Castilla y León, y además protagonista de algunas páginas cruciales de la historia de España.
El visitante tendrá ocasión de recordar el origen bélico de la ciudad (su nombre deriva de la ‘Villa Gothorum’ fundada por el visigodo Leovigildo frente a los Suevos), su papel en la Guerra de las Comunidades o anécdotas tan terribles como la razón de que uno de sus palacios cuente con una reja dorada.
Que Toro sea sede de Las Edades es una gran noticia para la localidad y para el conjunto de la provincia, pero sobre todo es una noticia que hace justicia a la localidad. Como dice su alcalde, Tomás del Bien, se trata de algo “que la ciudad llevaba esperando muchos años”. “Para Toro se inicia una oportunidad única y la ciudad estará a la altura del evento.Porque Toro tiene todo para ofrecer al turista”.
Además del patrimonio artístico que la exposición de arte sacro pondrá en valor, el primer edil añade “los otros muchos elementos patrimoniales que posee Toro: monumental, histórico, artístico, etnográfico, gastronómico, musical o natural”. Se muestra convencido de que “Toro se pondrá a disposición del visitante para que su experiencia sea lo más grata posible. Por eso Toro 2016 será el impulso para que la ciudad se coloque donde merece estar en el mapa turístico nacional”.
De forma paralela a la exposición se está elaborando un proyecto cultural que incluirá apertura de monumentos, exposiciones, jornadas, eventos, conciertos y recitales, así como publicaciones, “para arropar la exposición de arte sacro y que tanto Toro como la provincia de Zamora logren convertirse en un destino turístico de primer orden”, subraya Del Bien.
El suelo de la comarca y su clima confieren a los vinos de la DO su personalidad única.
Un conjunto urbano deslumbrante
Visitar Toro es adentrase en las páginas de la historia, descubrir un conjunto urbano deslumbrante, tanto por la presencia de numerosos elementos medievales como por la relación que guarda con el entorno. La singularidad de su trazado medieval en forma de abanico dirige al caminante a los principales monumentos y levanta testimonio de las diferentes ampliaciones que sufrió la ciudad.
El urbanismo local también se define por su relación con el Duero, al que la ciudad se asoma (desde un cerro de cien metros de altura) gracias a la defensa natural de sus majestuosas barranqueras. Destaca en este sentido el alcázar, un castillo del siglo X rodeado por siete torreones.
Santa María la Mayor
De la riqueza patrimonial de Toro destaca la que será sede de la XXI edición de Las Edades, la Colegiata de Santa María la Mayor, que vívidamente recuerda a la Catedral de Zamora y a la catedral Vieja de Salamanca. Sobre todo por su cimborrio, integrado en el denominado grupo de cimborrios leoneses. En el caso toresano, este elemento arquitectónico que se levanta sobre el crucero resalta sobre el conjunto y atrae la atención del observador, ya lo contemple desde el exterior, ya lo haga desde el interior.
La iglesia-colegiata comenzó a construirse en el siglo XII y es una de las construcciones más características del románico en su fase de transición hacia el gótico. Cabe destacar algunos de los tesoros que alberga el conjunto, como el Pórtico de la Majestad. En la sacristía se encuentra el famoso cuadro de la mosca, así como un Calvario de marfil único en España y una custodia de plata que estuvo en Londres hasta hace muy pocos años.
Colegiata de Santa María la Mayor, protagonista de la nueva edición de Las Edades.
La planta del edificio es de cruz latina, de cimentación imponente con grandes sillares. Cuenta con tres naves de otros tantos tramos, con bóvedas de horno en la cabecera, de cañón a la altura del crucero y nervadas en el centro. La cabecera consta de tres interesantes ábsides semicirculares; el central es el más decorado, ya que cuenta con arquerías y vanos ornamentados. También destacan la portada septentrional, la sacristía o el Pórtico de la Majestad. Dentro del edificio, destaca una talla del siglo XII de la Virgen de la Esperanza o de la O, con la Virgen encinta.
Además, el recorrido por esta ciudad histórica no puede dejar de lado el toro de piedra de origen vacceo, el puente del siglo XV, las iglesias de origen mudéjar o el Arco del Reloj (del siglo XVIII) como entrada a través de una de las murallas. No cabe duda de que 2016 será el año de Toro.
