La Encina, en Palencia, ofrece la posibilidad de disfrutar tanto de una completa barra de pinchos y raciones como de degustar una carta en la que el excelente producto de la tierra es protagonista. El lechazo churro asado en horno de leña es una de sus señas de identidad.
La Encina (calle de Casañe, 2, Palencia) es una referencia cuando se habla de barras bien nutridas en la capital del Carrión. Y del producto de la tierra bien tratado, como sucede en este restaurante con el lechazo churro asado en horno de leña de encina.El habitual de La Encina siempre encuentra una gran variedad de tapas además de su famosa tortilla de patata; la estrella.
Por algo es Ciri González tres veces ganadora del Campeonato de España de Tortilla de Patatas, un manjar que se puede degustar a diario. La receta básica se compone de patata de la provincia, cebolla, huevos de corral, aceite de oliva y sal, aunque la cocinera también se adapta a las preferencias de cada cliente.Entre la amplia oferta cabe señalar las croquetas rellenas de jamón ibérico, ensaladilla rusa con gambas, baguetina de lomo o de ternera, rulos de salmón rellenos de alcaparras, huevo y pepinillo, carpaccio de bacalao sobre cama de pimientos de Torquemada, lascas de tomate y rúcula, bocado de huevo envuelto en lámina crujiente de pan sobre suave puré de patata, gildas… y así hasta completar una larga lista.
No faltan las raciones: jamón ibérico, cecina preparada, setas, champiñones, morcilla de Palencia, mollejas lechales braseadas, y otras muchas más. Para la carta del restaurante buscan la mejor selección de calidad en el mercado, en pos de los sabores más auténticos.