La localidad burgalesa de Bisjueces deslumbra con el gran pórtico renacentista de su única iglesia, donde se encuentran dos esculturas que hacen referencia a la leyenda popular de los Jueces de Castilla
Dentro de la comarca de las Merindades y próximo al municipio de Villarcayo se levanta el municipio de Bisjueces cuyo nombre, cuenta la tradición, tiene su origen en los legendarios Jueces de Castilla. Se trataba de dos magistrados, Laín Calvo y Nuño Rasura, que impartían justicia en la localidad en el siglo IX y que fueron elegidos como jueces propios por los castellanos para resolver sus pleitos, evitando así acudir a la corte leonesa, que en ese siglo regentaba la autoridad en estas tierras. Sin duda, hablamos de una leyenda representativa de la voluntad autonomista de Castilla con respecto al centralismo regio, encarnado en el Reino de León durante esta época.
De esta tradición da testigo la impresionante portada de la iglesia de San Juan Bautista donde se encuentran dos esculturas en piedra de estos dos jueces. Este templo es sin duda el principal atractivo del pueblo, y en sus muros pueden entreverse las diferentes fases constructivas por las que pasó. Su valor artístico, tanto en su exterior como en el interior, le ha hecho receptor de sucesivas restauraciones desde su retablo barroco a las cubiertas de la nave.
Templo de una única nave declarado BIC en 1991
La iglesia parroquial de San Juan Bautista, declarada BIC en 1991, está localizada en la zona sur de la localidad, protegida por un recinto delimitado por un murete de piedra que lo separa del resto de espacios libres y parcelas privadas del entorno y que resuelve las diferencias de cotas del terreno en cada fachada. Se trata de un templo de una única nave, de gran amplitud, cuya entrada se produce por su fachada norte, mediante un gran pórtico que protege la imponente portada renacentista que da acceso al templo.
De su anterior fábrica románica únicamente han llegado nueve canecillos, reutilizados en el muro sur. La nave principal es sencilla y tiene distintos volúmenes añadidos, el más importante de los cuales es el pórtico anteriormente citado. A los pies de la nave, en su fachada oeste, se adosa el gran volumen de la torre, con tres cuerpos en altura.
Se cita en crónicas antiguas que la torre estuvo fortificada. El último cuerpo donde se ubican las campanas es una reforma del siglo XVIII, que enmascaró los elementos defensivos que llegó a tener previamente, cuando contó con una terraza defensiva descubierta y almenada.
En el interior, el templo también es un espacio unitario de una sola nave que presenta tres amplias bóvedas de crucería. En la cabecera se ubica un gran retablo barroco, recientemente restaurado, sobre un presbiterio elevado tres peldaños respecto de la nave. En la zona de los pies de la iglesia hay un coro que da paso a una estancia de baptisterio situada ya debajo de la torre. A través de dos escaleras de caracol adosadas al volumen de la torre se accede al nivel superior desde el que hay paso al espacio de entrecubiertas.
Una inversión de 200.000 euros para la sustitución de cubiertas
Este último año la Junta ha llevado a cabo una intervención en el templo de San Juan Bautista con el objetivo de garantizar su conservación, mediante la sustitución de las cubiertas del templo (nave central, sacristía, trojes o zonas de almacén y casa parroquia), salvo las cubiertas del pórtico y de la torre, en las que se intervino recientemente por parte de la Consejería.
En esta actuación, que ha supuesto una inversión de más de 200.000 euros, se ha recuperado la configuración original del edificio, su envolvente exterior, elementos estructurales y condiciones de estanqueidad de las cubiertas de la nave y dependencias anexas de la iglesia, así como la limpieza y reparación de las humedades interiores. La intervención también ha afectado parcialmente a las fachadas en aquellos lugares en los que existían grietas en los muros o que exigían intervenciones puntuales. En cuanto al exterior del templo, se ha intervenido para realizar un drenaje de los muros de la fachada norte y en el interior solo en el saneado de varias zonas del intradós de las bóvedas afectadas por humedades y en la renovación de la instalación eléctrica.
