Una filigrana se define como una acción de gran perfección o que requiere mucha habilidad y trabajo. Y en el mundo del arte podemos encontrar muchos ejemplos cuya maestría emociona
Elena Ortega y Daniel González
La piel de gallina es una reacción de nuestro cuerpo cuando sentimos frío o emociones muy intensas causada por la segregación de adrenalina. Se nos acelera el corazón, aumenta la presión sanguínea, nos sudan las manos, temblamos y nos recorren escalofríos por todo el cuerpo. Son muchas las situaciones que puede generarla, como por ejemplo exponerse a una obra de arte extremadamente bella, que en el caso más radical puede generar hasta un trastorno con denominación propia: el Síndrome de Stendhal.
En Castilla y León existen lugares que podrían considerarse no aptos para personas con alta sensibilidad artística, aunque bien merecen asumir el riesgo. Lugares que son verdaderas filigranas artísticas, donde la destreza, perfección y delicadeza del artista transmiten tanta emoción como un beso de enamorados.
Y, aunque podríamos destacar una multitud de monumentos, para hacerlo más breve hemos destacado nueve, uno por provincia:

La colegiata de Santa María la Mayor de Toro es uno de los monumentos más representativos del románico zamornao
1. Una puerta al paraíso en Toro
En la colegiata de Santa María la Mayor de Toro habría mucho que destacar, pero hay un lugar en su interior donde recrear la vista con gusto. Hablamos del Pórtico de la Majestad, una portada que bien podría servir de acceso a los cielos, con nada menos que siete arquivoltas decoradas con representaciones bíblicas muy detalladas.
Esta filigrana combina estilo románico y gótico, pero lo que le hace verdaderamente especial es que conserva todavía buena parte de su policromía original, pues tras permanecer a la intemperie durante casi dos siglos, a finales del siglo XV este espacio fue remodelado y reconvertido en la capilla gótica, resguardándose de la acción abrasiva de las inclemencias del tiempo.

El artesonado de la iglesia d0e Santa Colomba de la Vega es obra cumbre de la carpintería de armar española.
2. Coser madera para convertirla en un cielo estrellado
La iglesia de Santa Colomba de la Vega, en León, no muestra a primera vista nada demasiado especial, sino que habrá que adentrarse en ella para descubrir una obra cumbre de la carpintería de armar española.
Se presenta con una arquitectura exterior convencional, de mampostería, con nave rectangular única, pero esconde entre sus muros un auténtico firmamento de madera. Una bóveda policromada artesonada con motivos poligonales se despliega a lo largo y ancho de la cubierta de la desconocida iglesia de Santa Colomba de la Vega en un fructífero e impresionante intento de representar un cielo estrellado.

Capilla de los Benavente fue descrita por Eugenio D’Ors como la “Capilla Sixtina del arte castellano”
3. La ‘Capilla Sixtina’ del yeso
Protegida tras una artística reja, en la iglesia de Santa María, en Medina de Rioseco, Valladolid, aguarda la Capilla de los Benavente, descrita por Eugenio D’Ors como la “Capilla Sixtina del arte castellano”. Impresiona la enorme cantidad de esculturas en yeso que decoran las paredes y que aprovechan cada espacio, por pequeño que sea, para representar diferentes escenas de la Biblia.
No fue hasta una restauración en 2002 que las esculturas, ahora policromadas, recuperaron su color original, ya que estas permanecieron tintadas de negro hasta entonces debido a que la capilla fue usada de cocina durante la invasión de los franceses.
4. El milagroso arte de coser la piedra
En el monasterio de San Andrés de Arroyo, en Palencia, no llama la atención una impresionante portada ni una exuberante capilla. A veces la maestría no está en la cantidad, sino en la calidad, y así lo demuestran en San Andrés del Arroyo, donde lo que destaca es su columna angular noroeste que contiene en su ornamentación una de las mayores joyas del arte cisterciense de todo el país.
Lo curioso de este elemento es que en el arte cisterciense los escultores tenían libertad para crear bajo un criterio estricto: la sobriedad. Consideraban que una excesiva ornamentación distraía para recibir mejor el mensaje de Dios. Pero en este caso, el escultor sacó a relucir toda su genialidad, y llevó a cabo una filigrana de motivos principalmente vegetales cosidos alrededor del capitel y unidos al núcleo de la piedra a través de un muy limitado número de puntos de unión.
5. Una catedral dentro de otra catedral
La capilla de los Condestables da lugar a un maravilloso añadido a una obra ya maestra como es la Catedral de Burgos. Construida en el S. XV, la capilla es muchas veces definida como “una catedral dentro de la Catedral”, y no es para menos, pues se trata de una impactante mezcla de estilos en el que se fusionan el gótico tardío con las innovaciones renacentistas que da lugar a un gran referente europeo en la transición de estilos.
Tiene una planta poligonal cubierta con una bóveda con tragaluz en forma de estrella. Justo debajo de la claraboya se encuentran las estatuas talladas con gran delicadeza en mármol de Carrara de los Condestables de Castilla, quienes dan nombre a la capilla, bajo las que se conservan sus restos mortales.
6. Una ornamentada puerta al conocimiento en Salamanca
La Universidad de Salamanca no solo tiene el honor de ser la más antigua de España y una de las primeras de Europa, sino que también cuenta con una de las fachadas más impresionantes del país. Se trata de una portada tallada en piedra obra cumbre del estilo plateresco.
La fachada, construida 300 años después que la Universidad, destaca por su abundante y minuciosa decoración, repleta de detalles. Está desarrollada a modo de retablo y dividida en tres bloques, cada uno con sus propios elementos iconográficos, como las recurrentes calaveras, águilas o la famosa rana.
7. Una gloria románica en Ávila
La portada occidental de la basílica de San Vicente, en Ávila, es una obra de arquitectura románica tan espectacular que se llega a comparar incluso con el Pórtico de la Gloria de la catedral de Santiago de Compostela, probablemente el más importante y conocido del arte románico cristiano.
En la portada de la basílica abulense se distinguen hasta cinco arquivoltas, todas rica y delicadamente decoradas con motivos, desde vegetales hasta animales y geométricos. Por otro lado, en las jambas están esculpidos con maestría diez apóstoles y Cristo en Majestad en el parteluz.
8. Una fantasía románica envuelta en gótico
Al poco de finalizar la obra catedralicia románica en la localidad soriana de El Burgo de Osma, se ordenó su demolición para edificar un templo gótico al estilo de los que se estaban haciendo en Burgos o en Toledo. Es por eso que en la actualidad su catedral presenta unas líneas mayoritariamente góticas, pero hay algún elemento primigenio románico que sí ha sobrevivido.
6. Sala capitular de la catedral de #ElBurgodeOsma, único resto de la primitiva catedral donde se encuentra el Sepulcro de San Pedro de Osma. Está cubierta con bóvedas de crucería sustentadas por capiteles, algunos de ellos correspondientes a la obra románica. pic.twitter.com/Rf3BlNDJLc
— SoriaPatrimonio (@soriapatrimonio) May 1, 2019
El más destacado lo encontramos en la sala capitular, donde llama la atención la delicadeza de la escultura de los dos vanos que comunican este espacio con el claustro. Cada uno está formado por dos arcos copiosamente decorados con motivos bíblicos y apoyados en un impresionante parteluz con cuatro columnas en torsión. Es especialmente asombroso el gran nivel de detalle de las representaciones esculpidas en la piedra que los convierten en una auténtica obra maestra.

El esgrafiado es una técnica ornamental que se ha convertido en seña de identidad de la provincia de Segovia
9. Una filigrana en las fachadas de las casas segovianas
De la provincia de Segovia podríamos destacar numerosos lugares trascendentes en el arte. Pero, después de tanta iglesia queremos hacer una especial mención a la arquitectura popular, y eso nos lleva a una técnica que se ha convertido en seña de identidad segoviana: el esgrafiado.
Incluso las casas de nueva construcción cuentan con este detalle en sus fachadas que parecen encajes. Se usaba tanto para tapar posibles imperfecciones como por cuestiones decorativas y ahora también tradicionales. Y uno de los mejores ejemplos de esta técnica mudéjar lo tenemos en la fachada del Palacio del Conde de Alpuente en la capital. En él se diferencian hasta tres modelos de esgrafiado diferentes que decoran de arriba a abajo las paredes exteriores del edificio del siglo XV.
1 comment
La Universidad de Salamanca no es una de las más antiguas de España, ES LA MÁS ANTIGUA DE España, 800 años. Y una de las 4 más antiguas de Europa.
Por lo demás nada que decir. Que en Castilla y León tenemos un patrimonio cultural y arquitectónico insuperable.