El Hotel SPA Abadía de los Templarios, un cuatro estrellas superior, ofrece alojamiento en habitaciones y bungalows que respetan la arquitectura tradicional de la Sierra de Francia. Un oasis de tranquilidad para escapadas románticas y turismo familiar
A 45 minutos de Salamanca, junto al conjunto histórico de La Alberca, se encuentra la Abadía de los Templarios, un impresionante complejo turístico formado por un hotel de cuatro estrellas superior y 47 villas, o bungalows tipo dúplex. El conjunto, integrado en 100.000 metros cuadrados de naturaleza y rodeado por dos maravillas, la Sierra de Francia y el Parque Natural de las Batuecas, cuenta con unas extraordinarias instalaciones, que hacen de este lugar el marco perfecto para disfrutar de todo tipo de turismo, desde convenciones e incentivos de empresa, pasando por escapadas románticas, hasta el turismo familiar.
La Abadía de los Templarios está apenas a un kilómetro y medio de La Alberca, primer pueblo de España en ser declarado Monumento Histórico Artístico, en 1940, y el diseño del complejo respeta el estilo y los materiales de la arquitectura local. Eso sí, combinado con un inspirador espíritu medieval.
En el hotel se pueden contemplar las bóvedas, torres, vidrieras, bordados y artesonados donde los maestros artesanos, durante una década, han dejado su impronta utilizando los materiales autóctonos, empleados durante siglos. En contraste con ello, las habitaciones cuentan con una decoración moderna y acogedora.
El complejo dispone también de un concepto diferente de alojamiento, ideal para el turismo familiar. Se trata de las villas, compuestas por salón y habitación doble con baño en el piso inferior y habitación de matrimonio con baño en el superior. Diseñadas con un estilo arquitectónico serrano, ofrecen la posibilidad de disfrutar de una casa rural con servicios propios de hotel, dentro de un entorno en donde el huésped se encuentra como en un pequeño pueblo.
Tanto en las villas como en el hotel reina el silencio y la tranquilidad que requiere una escapada romántica. El hotel dispone de diferentes tipos de habitaciones, desde las abuhardilladas hasta suite imperial, pasando por junior suite; todas ellas con chimenea.
Su propuesta se abre también al denominado turismo termal, ya que dispone de un extraordinario spa, de mil metros cuadrados, que cuenta con todo tipo de masajes y tratamientos. Destaca, por su exclusividad mundial y en honor a la flora autóctona, la ‘castañaterapia’, recomendada para reumatismos, artrosis, problemas circulatorios, fragilidad capilar y problemas dermatológicos. Si no se desea tratamiento o masaje, simplemente el circuito termal, de dos horas de duración, proporciona esa sensación de relax que todo cliente busca en un spa.
La Abadía de los Templarios también ofrece diferentes fórmulas de turismo activo, desde el paintball o los paseos a caballo hasta paseos en globo, senderismo, tiro con arco, paseo en catamarán por el río Alagón, tenis o pádel. En sus instalaciones también se celebran catas de vino y de ibéricos.
Además de estas actividades, el hotel ofrece otras posibilidades de diversión, alejadas de las habitaciones para no perturbar el sueño y la tranquilidad: la discoteca La Cueva y el restaurante La Catedral, donde se realizan cenas medievales. Este restaurante, situado en la plaza mayor de La Alberca, ofrece una gastronomía típica de la zona, donde destacan los asados en horno de leña, regados con una variada oferta de vinos.
Asimismo, el turismo de congresos encuentra aquí acomodo, no solo por contar con los más modernos medios audiovisuales, sino también por las posibilidades que ofrece desde el punto de vista de actividades al aire libre, así como por la tranquilidad y belleza del entorno. De hecho, el complejo dispone de un auditorio recientemente inaugurado con capacidad para 300 personas, así como de salas multifuncionales adaptables a las necesidades de los clientes.
El entorno y los amplísimos jardines que rodean el hotel sirven de lugar idóneo para llevar a cabo ‘outdoor training’, disfrutar de un placentero almuerzo o realizar cualquiera de las actividades que ofrece el complejo.
