La Comisión Europea aprobó hace un año el registro de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Cebreros. Culminaba, de este modo, el proceso de reconocimiento de esta DOP que se inició en noviembre de 2015, cuando la Asociación Vinos de Cebreros -ahora reconocida como su órgano de gestión- presentó ante la Consejería de Agricultura y Ganadería la solicitud de protección.
La decisión, además, cerraba el mapa vitivinícola de Castilla y León en cuanto a las comarcas históricas, con un total de trece.
La zona de Cebreros cuenta con una gran tradición. Son numerosos los textos históricos y legales donde se citan los vinos de esta zona situada al sureste de la provincia de Ávila, entre las cuencas de los ríos Alberche y Tiétar, separadas por el macizo oriental de la Sierra de Gredos y que comprende 35 municipios.
Cebreros tiene como variedades principales a la garnacha tinta y el albillo real, lo que junto a la longevidad y altura del viñedo, y un clima benigno, permiten obtener unos vinos con grado alcohólico destacado y muy buena acidez (alta y equilibrada), que proporciona frescura y viveza. Son vinos aptos para crianzas prolongadas.
La elaboración de los vinos protegidos por la DOP Cebreros se debe realizar exclusivamente con uvas de las siguientes variedades:
-Variedades de uva blanca: albillo real.
-Variedades de uva tinta: la garnacha tinta como variedad principal, además de dos secundarias: garnacha tintorera y tempranillo. El vino tinto se elaborará con un mínimo del 95% de garnacha tinta.
El reglamento de uso de esta DOP solo permite inscribir nuevas plantaciones de las variedades principales.
También establece que el vino blanco se elaborará exclusivamente con la variedad albillo real y que el rosado se elaborará con las variedades admitidas en el pliego de condiciones, con un mínimo del 95% de garnacha tinta.
