Injustamente desconocidos, los hermanos Corral de Villalpando son autores de sobresalientes obras del Renacimiento castellano. Su sello de identidad: el yeso
Daniel González
Carpinteros, albañiles, electricistas, fontaneros, cristaleros… Es frecuente que, cuando te decides por reformar tu casa o construir una nueva, a la hora de contratar a los obreros, te encuentres con que estos tienen parentescos. Pueden ser padres e hijos, hermanos o primos que forman empresas familiares dedicadas a oficios de diferente índole.
Esto pasa ahora, pero también pasaba, y con más razón, hace siglos, como bien demuestran unos hermanos llamados los ‘Corral de Villalpando’, que dejaron su brillante impronta renacentista en la ornamentación de numerosas y destacadas iglesias de Castilla y León. Es posible que no te suenen, pero seguramente algunas de sus obras sí.
Exponentes del Renacimiento castellano
Empecemos primero por presentarlos. Los hermanos Corral fueron una familia de artista nacidos a principios del siglo XVI, a los que se les añadió el apodo de ‘Villalpando’ por ser oriundos de la villa zamorana con este mismo nombre. El taller familiar lo formaban Jerónimo Corral, maestro en la ornamentación con yeso, Juan Corral, dedicado a la arquitectura, y Ruy Corral, especializado en las rejerías.
De los tres vamos a destacar los dos primeros, Jerónimo y Juan, que trabajaron mano a mano en diferentes monumentos de la provincia de Palencia y Valladolid. La escasez de documentos sobre ellos ha dificultado el trazo de una biografía, pero sus obras representan uno de los capítulos más sobresaliente del renacimiento castellano, sobre todo por la maestría alcanzada en el trabajo del yeso.
La dependencia de lo arquitectónico, unida a las dificultades de conservación y al carácter efímero de la materia, ha provocado que muchos ejemplos de su elenco artístico se hayan perdido o hayan llegado a nosotros en deteriorado estado. Vamos a presentaros algunos de las más famosos que se pueden contemplar actualmente.
1. Su paso por Medina de Rioseco
En esta monumental localidad de Tierra de Campos nos encontraremos con la obra más reconocida de los hermanos Corral: la ‘Capilla Sixtina del arte castellano’, sobrenombre por el que se se conoce popularmente a la capilla funeraria de los Benavente, situada en el interior de la iglesia de Santa María de Mediavilla. En la desbordante ornamentación de este espacio entenderás porque estos los Corral deberían ser más reconocidos. La capilla se considera una de las obras más significativas del arte español del Renacimiento.
En las yeserías de la bóveda se representa El Juicio Final, y distribuidos por sus muros la Creación del universo, el Pecado Original y otras escenas tanto religiosas como profanas. Todo envolviendo el retablo de madera policromada de Juan de Juni, reconocido artista con el que se especula pudieron tener más colaboraciones.
También se conservan en esta villa vallisoletana dos conjuntos independientes atribuidos a los hermanos Corral en la iglesia del convento de San Francisco. Se trata de la decoración de las dos tribunas que sustentaban los órganos y la de las bóvedas de crucería estrellada de la capilla de los Villasante.
2. Su paso por Palencia
En la ciudad cruzada por el Carrión tuvieron su residencia estos hermanos que dejaron la impronta de su audacia en la Catedral de Palencia. Más concretamente intervinieron en la reforma de la capilla de san Pedro o capilla de los Reyes, llamada así por los tres relieves en yeso que la adornan con el tema de los Reyes Magos y que tienen la autoría de los Corral de Villalpando.
También trabajaron en la iglesia de San Francisco de la ciudad, donde se les atribuye la bóveda de complejas crucerías de la capilla de San Ildefonso.
3. Su paso por Medina del Campo
En esta localidad y pueblos circundantes podrás contemplar las últimas obras realizadas por los Corral. En la misma Medina del Campo se sitúa el monasterio de Santa María Magdalena regentado por las monjas Agustinas de clausura y fundado en el siglo XVI. Su estilo es gótico-renacentista y por la mano de los Corral pasaron las bóvedas de su ábside, crucero y coro alto con una detallada ornamentación adherida a los nervios y plementos.
Salimos de Medina del Campo y recorremos 8 kilómetros al norte para contemplar otra de las grandes obras de estos hermanos. Se trata de una de las yeserías más espectaculares que se conservan en la provincia de Valladolid ubicada en el interior de la iglesia de Rodilana, localidad perteneciente al municipio de Medina. En su cúpula ovalada te encontrarás con una exuberante decoración de yeso, en parte policromado y dorado, que mantiene un perfecto equilibrio y estructura en su ornamento.
Muy parecido al trabajo de Rodilana son también la yeserías policromadas con motivos vegetales y mitológicos del palacio de recreo construido a las afueras de Medina del Campo, conocido como la Casa Blanca. Perteneció a la familia Dueñas y para su edificación se contrató a los mejores artistas del panorama renacentista, tratándose de una de las mejores construcciones palaciegas de este estilo que se han conservado en nuestro país.
Por último, otra localidad cercana a Medina del Campos en la que también intervinieron los hermanos fue Villaverde de Medina, donde se encargaron de las decoración de la techumbre y muros del ábside rectangular de su iglesia de Santa María del Castillo.
Si quieres ampliar la información sobre estos artistas y su obra, existe un amplio estudio realizado por Sergio Pérez Martín y Josemi Lorenzo Arribas (Disponible pinchando aquí)
